Nació en Valladolid, en el seno de una familia tradicional. Tras mudarse a varias ciudades de España, volvió a Valladolid a estudiar en la universidad. Sin embargo, tras la muerte de Fernando VII, lo enviaron a estudiar Derecho a Toledo (años después lo mandaron de nuevo a Valladolid porque se distraía en otras ocupaciones). Le gustaba leer obras de Alejandro Dumas, Víctor Hugo, el duque de Rivas y Espronceda.
Su padre, cansado de que no hiciera nada, lo mandó en 1836 a cavar viñas pero, a mitad de camino, Zorrilla robó una yegua y huyó a Madrid. Allí frecuentó los ambientes artísticos y bohemios de Madrid, aunque también pasó mucha hambre.
En el funeral de Larra (1837), escribió un precioso poema por el que recibió muchos elogios y se hizo amigo de José de Espronceda.
Empezó entonces a escribir para el periódicos como El Español y a frecuentar la tertulia «El Parnasillo».
En 1838 ya había publicado un libro de poesía y varias obras teatrales, y se casó con Florentina Matilde O’Reilly (viuda irlandesa 16 años mayor y un hijo). A lo largo de su vida tuvo varias amantes.
En 1844 publicó su obra más conocida: Don Juan Tenorio. En 1845 abandonó a su esposa y se fue a Francia (aunque volvió a Madrid para el funeral de su madre en 1846), a Londres (1853), a México (1855), donde pasó once años, y a Cuba (1858). Cuando su esposa murió en 1865, volvió a España.
En 1869 se casó en Barcelona con Juana Pacheco Martín cuando ella tenía 20 años y él 52. Vivieron con apuros económicos porque Zorrilla nunca supo administrarse. Vivieron en Roma entre 1871 y 1873 y después se mudaron a Francia durante los siguientes dos años. Volvieron a España en 1876 y trabajó leyendo sus obras.
En 1885 tomó posesión de la silla L en la Real Academia Española. Años después, en 1893, murió a causa de un tumor cerebral.
Don Juan Tenorio
Esta obra teatral escrita en verso y estrenada en 1844, llevó a Zorrilla a la fama y no ha dejado nunca de ser representada. Su protagonista, don Juan, que no era nuevo en la literatura (ya había aparecido en El burlador de Sevilla de Tirso de Molina o en el Don Juan de Molière), es un seductor libertino. Don Juan no entiende las normas y desafía constantemente a vivos y muertos. Sin embargo, consigue salvar su alma gracias al amor puro de doña Inés. Y esto precisamente es lo que distingue a este don Juan de los demás: que no se condena su alma, sino que se salva.
La acción dura dos noches, separadas por cinco años.
La obra se divide en dos partes. En la primera parte se conocen las aventuras amorosas del protagonista, también a Inés y la muerte de su padre a manos de don Juan en un duelo. En la segunda parte se muestra la conciencia de don Juan enfrentada al mundo de los muertos. Finalmente suplica piedad y se le concede, por lo que se salva.
Características románticas de Don Juan Tenorio:
Ambientación tenebrosa, lugares solitarios como el cementerio. La acción suele ser de noche, en la naturaleza.
Amor imposible entre los protagonistas: no pueden estar juntos porque don Juan mató al padre de doña Inés (entre otros) y huyó a Italia, donde los muertos le persiguen.
Los protagonistas: el hombre es solitario, de familia noble, libertino y seductor; la mujer representa la inocencia y virtud cristiana.
Final trágico: los protagonistas mueren.
Misterio y fantasía: las estatuas y las sombras hablan, se idealiza el cielo y el infierno.
El sentimiento es más fuerte que la razón: doña Inés no podía evitar estar enamorada de don Juan, aunque pesaran las razones.